EL LIBRO DE MICROESTIGMAS

PRÓLOGO DE LA ILUSTRADORA

Primero quise encajar en el mundo, parecía yo de otro planeta y me dejé los vientos en transformar lo que de manera natural y espontánea surgía de mí. Lo pasé tan mal…
Luego (quizá estemos hablando de veinte mil años después), fui aprendiendo a respetar mi espacio, mis pájaros, mi planeta interior y el inabarcable universo que me habita. Lo pasé tan bien…
Pero ni en una ni en otra forma logré sentir la riqueza del equilibrio que desde lugares recónditos siempre brotará queriendo aparecer, imponerse… Es la pulsión vital que nos mueve, la creación de la armonía de las partes, la danza ecuánime que nuestra propia naturaleza nos requiere una y otra vez.
Por eso dije sía la participación en este libro, con la confianza de poder expresar en él algunas de las formas que acontecen en el mundo de ahífuera y algunas de las formas de las que siento aquídentro.
A decir verdad, el equilibrio siempre es escurridizo y parece escabullirle en el mismo instante en el que crees que lo conseguiste. Cuento en esta obra lo que otros viven, traduzco a viñetas lo que contaron y sintieron y es asícomo me involucro en él, con trazos, con líneas, con curvas, con rotuladores y poniendo mis manos al servicio de las experiencias que contamos.

Lo que pienso y siento al respecto de todas ellas se queda para los más cercanos, tal vez nos veamos en los bares y podamos dialogar juntos, reflexionar en equipo, mientras tanto que sean otras voces las que amanezcan en los ratos que dedicaréis a leer esta obra, en vuestro cuarto, en ese rincón que consideráis solo vuestro y ojalá que desde el espacio más blandito y tierno que sintáis por dentro.
Solo con ternura transformaremos el mundo, solo con la honesta vulnerabilidad que nos habita y alberga podremos construir un planeta menos hostil y más amoroso.
La palabra amabilizar ya no está en el diccionario pero ojalá logremos incluirla, de tanto usarla, de tanto hacerla, en cada paso que damos en la majestuosa aventura de estar vivos.
Gracias.